Si hace unos días recomendábamos la película The Artist, que refleja la historia del cine en su paso del mudo al sonoro, ahora nos toca retroceder unos cuantos años y sumergirnos en los mismos orígenes del cine; el París de un ya retirado Georges Méliès.
Así es, La invención de Hugo, de Martin Scorsese (estreno el 23 de febrero), es la carta de amor del director al cine mudo y a la literatura juvenil clásica, con numerosas referencias a uno y a otra que harán las delicias de los más cinéfilos.
La revista Caimán Cuadernos de Cine, le dedica un amplio análisis en su número de febrero: “es una de las películas más vitalistas y desbordantes del último cine de Martin Scorsese, ofrece una ocasión de oro para volver los ojos de nuevo hacia Méliès. Despliega sobre las pantallas un arrollador tobogán de ilusión y de magia tridimensional”
La invención de Hugo, basada en “ese extraño objeto” que es La invención de Hugo Cabret, de Brian Selznick promete ser la película ideal para ver en familia una fría tarde de invierno.
